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"Helón" aparece en la Peninsula de Yucatán; Mayas prevén la catastrofe

Mérida, Yucatán, México | Diciembre 28 de 2013

El pasado 21 de Diciembre de 2013, se dejó ver en los cielos de la Península un fenómeno óptico conocido como "Helón", que no son mas que iridiscencias que suelen aparecer en  el cielo como manchas irregulares de colores que suelen formarse en  las cercanías donde aparecen el Sol o la Luna.

Los colores que presentan estas iridiscencias dependen del tamaño de  las gotas en las nubes, siendo los colores más brillantes cuando las  gotas son de mayor tamaño, y del ángulo de visión del observador.

La aparición de este fenómeno, coincidió con los reportes de un joven lingüista llamado Aarón Puc Chi, quien describió este fenómeno solar como si de momento hubieran dos soles en el cielo.

"Alrededor de las 3:40 de la tarde, observé al helón ubicándose en una posición cenital, con una leve inclinación por el suroeste (por el sur y el poniente), además de él había otros parecidos a dos rayas más abajo, no se distinguen muy bien, ya que por ratos aparecían y desaparecían, en sí por momentos hasta se parecían que habían dos soles

La antropologa Ana Patricia Martinez Huchim, dijo en comentarios relacionados al "Helón", que es un fenómeno raro que está asociado a enfermedades o catástrofes naturales,

Por su parte, Bernardo Caamal, de la Fundación Produce de Yucatán, dijo que dependiendo del color y la hora, tiene una interpretación asociada generalmente a sequía y hambrunas.

"Escuché de los sacerdotes mayas decir que es Kukulkán descendiendo, siendo 21 de diciembre es el primer año maya", apuntó Puc Chí.

María Luisa Góngora Pacheco, promotora cultural  del municipio de Oxkutzcab, dijo vio al helón hace varios años y que “cuando sucede este tipo de fenómenos, son mensajes de los dioses mayas y que están relacionados a catástrofes que afectaran a la humanidad”.

En sí, para la nueva generación de mayas, no todos conocen este tipo de fenómenos celestes, porque es la primera vez que escuchan el nombre del helón.

La observación de los cielos, la interpretación de la posición de los astros y los fenómenos naturales como las frecuencias de las lluvias y las sequías siguen siendo una herencia de la cultura maya y sus actuales herederos continúan en su papel de observarlos.

"Tal vez para algunos sería como un arcoiris nada más, pero sería prudente investigar a mayor profundidad", dijeron.

Con información de Excélsior y "am"
N          E          W          S

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